Era alguien que conocia sus pensamientos, lo que creia, en lo que soñaba cuando las luces de la calle se hacian tan tenues y lejanas que las bombillas de su cabeza parecian grandes fotos anunciando un nuevo concierto en la sala vip de un local para chiquillos ( adinerados)
A veces, la gente te decepciona enormemente, pero no por ello has de prder la esperanza en la raza un humana. La gente, solo, no está en tu cabeza y no sabe lo que realmente desearias en ese preciso instante. Puede que me felicites o puede que no, o quizás no lo he visto o no he querido verlo( venir, sigiloso, susurrando, serpeteante entre los recodos de una noches que se acaba en un coche con olor aún a nuevo) Gracias, cabeza, por seguir sobre mis hombros. Brindemos, por muchos años más en el mismo lugar[del universo, entre el infierno y el cielo] en la memoria compartida.
L.A.C.O.N.I.C.O. Ocho horizonta.
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